Por Gimena Bugallo y Carolina Barbosa
El próximo 27 de febrero, en el Prado Gaucho, se dará comienzo a la apertura de grilla de la edición 2022 de la Fiesta de la Vendimia con la Bendición de los Frutos. Luego, los días 5, 6 y 7 de marzo, se continuará con los festejos de los que participarán grandes artistas de la música local.
El acontecimiento mendocino es una de las celebraciones argentinas más importantes del mundo y venera el cultivo, la cosecha y producción de la uva. Las raíces de la misma, acarrean una historia ancestral de acción milenaria de transformar el fruto de la vid en vino y hoy, varios años después, se le rinde culto al celebrarla majestuosamente a los pies de la Cordillera. La esencia del trabajo y la conexión del hombre con la tierra forman parte de este homenaje que reúne a un sinfín de turistas y que ya se está vibrando en el aire.
Si bien este gran evento popular será el protagonista indiscutido de los primeros días de marzo, la bella Mendoza nos invita también a celebrar y sumar otras alternativas. Si estás camino a la Fiesta de la Vendimia y tenés ganas de explorar nuevos rincones de la provincia, te invitamos a descubrir cinco lugares que van a potenciar tu estadía y merecen ser incluidos en tu itinerario.
-Desierto de las Huayquerías, Mendoza
Un paisaje seco e inhóspito, de tonos rojizos y pasteles, ideal para los amantes de la aventura. Su nombre proviene del vocablo “Huayco” que significa cauce o arroyo seco y se encuentra en el departamento de San Carlos, a poco más de 100 km de la ciudad capital de Mendoza. Las figuras que se asoman, esculpidas por la propia naturaleza, se abren paso entre el relieve volcánico y la tierra, ofreciendo una visual imponente. Se ofrecen varias caminatas guiadas a diferentes locaciones privilegiadas para aquellos que estén buscando una conexión más profunda con la montaña dado que, este desierto, merece la pena ser explorado intensamente. Inclusive, se ofrece la posibilidad de hacer trekking y rapel.
-Caverna de las Brujas, Mendoza
Sancionada en los 90 como un área natural protegida, esta cueva de rocas calcáreas y origen marino datan de la era jurásica y se ha convertido en un monumento nativo de la región. Ubicada al sur de la provincia de Mendoza, en el departamento de Malargüe, estos sedimentos recibieron la acción del agua sobre las rocas y no sólo ha erosionado y cavado inmensas galerías subterráneas de gran profundidad sino que también, han creado formas y colores singulares de estalactitas y estalagmitas. La Caverna de las Brujas se divide a partir de diferentes espacios denominados “salas”, entre las que se encuentran la Sala de la Virgen, la de las Flores y la de los Encuentros. Allí, el guía provee al turista de equipamiento adecuado para realizar el trayecto, como cascos y linternas, y es aconsejable tener un buen calzado para el recorrido. Un dato interesante es que esta caverna es una cavidad viva, es decir que continúa, hoy en día, en permanente crecimiento.
-Laguna del Diamante, Mendoza
Una reserva natural protegida que se ubica a 230 km de la ciudad de Mendoza y a 130 km de la Villa de San Carlos. Sus aguas se asientan sobre una antigua caldera volcánica de gran hundimiento con forma de olla y reflejan la figura del volcán Maipo que descansa junto a ella. Con la visual completa, esto genera un rombo perfecto que, sumado a la cristalinidad de la corriente, parece verse un diamante, de ahí su nombre. Las condiciones climáticas aquí son adversas dado que está próximo a la cordillera y es por eso que, tanto la flora como la fauna, debió adaptarse a la sequedad de los suelos y el frío. El guanaco, el águila mora y el zorro colorado son algunos de los residentes de la zona. Quienes visitan este imperio de altura quedan maravillados con la perfección de estas tierras sagradas oyendo, en el más delicioso silencio, los latidos propios del corazón.
-Cañón del Atuel, Mendoza
La adrenalina de vivir una aventura envuelto en un escenario excepcional. Dentro del departamento de San Rafael, en Valle Grande, se encuentra esta extensión estrecha de tonos rojizos y naranjas, que desemboca en el río que lleva su mismo nombre. De origen paleozoico, fue formada como consecuencia del curso de las aguas y la erosión del viento. Este lugar es una de las visitas más solicitadas dado que existe la posibilidad de realizar diferentes circuitos y actividades por lo que funciona como un gran imán para los amantes del deporte y personas de espíritu inquieto. Las aguas, entre tintes esmeraldas y turquesas, son abrazadas por las rocas y los árboles que allí descansan. Rafting, kayak, paseos en catamarán, windsurf, cabalgatas, mountain bike y travesías en moto o 4×4, son sólo algunas de las alternativas que se ofrecen en esta región para disfrutar en soledad o acompañado.
-Puente del Inca, Mendoza
Un monumento natural de amplio valor histórico y geológico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En la región altoandina, al noroeste de la provincia, en el departamento de Las Heras, ubicamos este ícono internacional, de características únicas. Esta formación rocosa, suspendida a varios metros sobre el río Cuevas, presenta una paleta de colores que van desde el verde hasta el naranja y del amarillo hasta el ocre. Su estructura natural, de origen desconocido, ha despertado el interés e inquietud de quienes la descubren así como una gran cantidad de mitos y leyendas que van peregrinando de boca en boca. Inclusive, cuentan que sus aguas termales, a unos 34°C aproximadamente, contienen propiedades curativas. Un lugar magnético, con un profundo significado histórico, social y cultural.
